En verdad, cuando se llevan a cabo en México, se realizan de forma irregular, con algunos buenos sabores, presentaciones medio memorables, filas largas aparte de descontroladas, precios abusivos, bandas mediocres; pero, lo que paso en colmena es lo peor que haya experimentado, en cuanto a organización y logística.
Sabado 07 de Junio 2008
11:00
Arribamos al estadio olímpico de CU, de acuerdo a la sugerencia, de llegar una hora antes de la salida de nuestro camión. Para empezar: hubo un atraso de media hora en la salida de los camiones.
12:15
Abordamos el primer autobús de las 12, todo parece ir tranquilamente, sin problemas.
14:00
La llegada del autobús hacia el jardín sagrado, se volvía más lenta a cada minuto, muchos pasajeros deciden irse a pie, cosa que termina por ser necesaria, para no perder el tiempo. Para ingresar, una enorme fila atendida por un insignificante staff, más de media hora para poder entrar.
14:40
Adentro del recinto, estaban por empezar cojolites, al parecer el retraso ya había comenzado a descontrolar las presentaciones del cartel.
Los Cojolites.
El huapango veracruzano, políticamente incorrecto, con mucha enjundia… de lo mejorcito en los abridores.
Simplifires.
Una decente presentación, buenos riffs, con un new wave platillero de briosa ejecución; aunque, con una respuesta muy ligera de parte de la audiencia.
Juan Son.
Hay tantos defectos en este pretencioso, que ya me dio flojera enlistarlas.
Los Dorados.
Fueron de los más afectados por el tiempo mal administrado, salieron a prodigarse con su jazz, la gente les pidió más, pero ya no se pudo.
Chikita Violenta.
Los protegidos de Broken Social Scene, tocaron solo tres rolas (nada más me acuerdo de War), y pues ahí van fogueandose, por ahora les doy el beneficio de la duda.
Childs.
Con una obvia influencia de Post rock, Shoegaze, electrónica y demás; no creo que merecieran tocar antes de Andrew Bird; es decir, les falta un buen.
Andrew Bird.
Ya habia escuchado recomendaciones de este señor, antes del evento; aun así, decidí no predisponerme de escuchar sus discos con apuro y pocos días antes de su presentación, para tomar una impresión más abierta (de hecho, conocía menos de medio cartel).
Ciertamente, con grandes fallas del sonido… se rifó el guitarro, violinista, xilofonista y silbador (solo le falto el pinole), fue un preliminar de lujo y con un excelente repertorio (aunque lo de “Besame mucho” se lo pudo haber reservado).
Sigur Rós.
Al comenzar con Svefn-g-englar la noche prometía tornarse legendaria y memorable, lapso que solo duro hasta Glósóli; entonces fue en la realización de Vaka, donde caí en el detalle del baterista Orri (su misteriosa desaparición). La noche ya había comenzado a quebrarse, Jónsi pide paciencia y un momento de descanso, entra la seccion de vientos a mantener la atención del respetable (desde ese momento, menospreciado). Al terminar el himno islandés, alguien explica la situación (a medias) y solicita la presencia de una doctora.
Los islandeses regresan para cumplir con lo que queda de ellos, tocando Gítardjamm, luego Gobbledigook un momento emotivo y contradictorio (¿papelillos de plastico en un recinto ecologico?), para terminar tocaron versiones muy desinfladas de Heysátan y All Alright. Lo que ya no dejo animo alguno del encore (ni siquiera en los asistentes).
21:30
La gente conglomerada, emprende la salida como ganado, porque no hay responsable alguno que pueda dar orden o algunas sencillas indicaciones.
22:00
El staff de Live tours es ridículamente pequeño (10 gentes por mucho), sin idea alguna de coordinar a otras miles de personas confundidas, convertidas en un embudo humano.
22:30
Somos abandonados, lo único que sabemos es: que para llegar a algún lado, tenemos que caminar y abordar cualquier autobús que no estuviera ya atiborrado. Los chóferes intentan llevar a algunos parados, pero aún con eso, había cientos que caminaron hasta donde se encontraban el resto de las unidades; mientras tanto, muchos otros se mantenían a kilómetros de distancia descendiendo por la angosta carretera.
Domingo 08 de Junio 2008
01:00
Abordamos un nuevo transporte (que nos llevaria a C.U.), con una enorme preocupación: ¿Los cientos de personas que seguían descendiendo, encontraran transporte cuando lleguen al estacionamiento? ¿Saldrán todos de aquí?
02:30
Llegamos a C.U. agotados y furiosos, aún tenemos que agarrar un taxi que nos lleve a la TAPO y de ahí tomar un Bus hasta puebla (llegaríamos a casa a las 6:00).
Apunte personal.
El intento de kermes llamado Colmena: deja más resentimiento que buenos recuerdos (la presentación Andrew Bird y las 6 canciones de Sigur Rós), con un cartel de evidentes altibajos (¿Quién puso ahí al babotas de Juan Son?). El problemático e infernal transcurso del lugar del evento hacia el autobús: simplemente no lo vale, ningún gran concierto, por muy ambicioso y bien intencionado que sea, no lo vale.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario